Al finalizar 2025, los palestinos en Gaza esperan la llegada del Año Nuevo agotados, doloridos y con la frágil esperanza de que su "pesadilla interminable" pueda finalmente terminar.
Para los residentes del castigado territorio, la vida diaria es una lucha por la supervivencia.
Gran parte de la infraestructura de Gaza yace en ruinas, la electricidad sigue siendo escasa y cientos de miles de personas viven en tiendas improvisadas tras haber sido desplazadas repetidamente durante los dos años de combates que comenzaron con el ataque de Hamás contra Israel en octubre de 2023.


















